Lilian Cristina Andreu de Bicard, conocida en el medio artístico como Licry Bicard, nació en San Salvador, en 1944. Aunque se considera en gran medida autodidacta, recibió clases en el Centro Nacional de Artes en 1972, con maestros como José Sánchez Carralero (España 1942) y en 1975 con Valero Lecha. De forma adicional, entre 1978 y 1979 tomó clases de dibujo anatómico con el escultor y dibujante español Benjamín Saúl.
Ha desarrollado una trayectoria artística muy fructífera que refleja sus exploraciones formales, estilísticas y temáticas, a través de la pintura, escultura, dibujos y grabados en diversas técnicas y estilos, incursionando también en las instalaciones. Además de trabajar en su propia obra, Licry Bicard ha realizado restauración de obras artísticas desde 1994. Sus aportes más destacados al arte nacional han sido la inclusión de temas prehispánicos, exquisitos grabados en monotipo, sus pinturas del paisaje, una rica exploración de los límites de los materiales plásticos, y una prolífica producción de dibujos que logran hacernos reír en medio de su crítica social.
Ha expuesto individualmente en El Salvador en más de quince ocasiones y ha tomado parte en más de 150 exhibiciones colectivas a nivel mundial. Su obra forma parte de importantes colecciones públicas y privadas en Centroamérica, Estados Unidos, Colombia, Perú, España, Italia, Suiza e Israel. En 1995, publicó su catálogo de obras Licry Bicard y el don alado de la imaginación.
Ha ilustrado varios libros de autores salvadoreños, entre ellos la primera edición de Cuentos del mar, de Ricardo Lindo, La cantata de mayo, de Rolando Elías, y varias revistas.
“Lo que usted ve, eso es”, así describe Bicard a sus piezas, porque aseguró que le encanta la lectura del dibujo, “que las personas saboreen el dibujo”. Además, agregó: “A mí me gusta la naturaleza, la acción, la fregadera, porque el arte es para vivirlo”.
En el espacio artístico y cultural también se encuentran las obras de Licry Bicard, reconocida en 2004 por la Asamblea Legislativa como “Pintora Meritísima”, quien con sus diversas técnicas y estilos en dibujo, lápiz y monoprint marca la diferencia.
Entre las distinciones que ha recibido están el Diploma de Honor del Certamen Nacional Calificatorio de Pintura “José Mejía Vides” del Centro Cultural Salvadoreño, en 1990; un reconocimiento por el Club Rotario San Salvador Cuscatlán en 1999 y el título de Pintora Meritísima, otorgado por la Asamblea Legislativa de El Salvador en 2004.
Como profesora, además de dar clases de arte desde su estudio durante la década de los ochenta, enseñó dibujo de la figura humana en la Universidad Doctor José Matías Delgado, en 1990. Desde 2002 realiza talleres de arte para niños. Es restauradora de obras de arte desde 1996, bajo la dirección del maestro español Roberto Arce, a quien considera su otra gran influencia formativa. Bicard fue fundadora de la Asociación de Artistas Plásticos de El Salvador (ADAPES), donde ocupó el puesto de Tesorera en 1990, y de Vicepresidenta entre 2007 y 2008.
Actualmente, es la Presidenta del Instituto Cultural El Salvador-Israel. Ha viajado por Norte, Centro y Sudamérica, Europa y Medio Oriente. Reside actualmente en San Salvador con su esposo Leopoldo. Tiene tres hijos: Raquel, Mónica y Mauricio.
Su obra incluye pintura, dibujo, grabado, escultura e instalación. Su temática es variada, desde figuración, paisaje y bodegones hasta arqueología. Su trabajo se ha desarrollado en diversos estilos, donde los más importantes son el realismo mágico, la abstracción y el expresionismo. Comenzó a exhibir en 1970, y ha celebrado veintiséis exposiciones individuales en El Salvador y Costa Rica desde 1980. Ha exhibido en Centroamérica, México, Estados Unidos, Canadá, Chile, Brasil, Argentina, Ecuador, República Dominicana, Puerto Rico, los Países Bajos, España, Francia, Taiwán, Japón e Israel.
Entre sus exhibiciones más importantes están: la XVIII Bienal de Sao Paulo (Brasil, 1985); la Bienal de Pintura del Caribe y Centroamérica en Santo Domingo (República Dominicana, 1992); la IV Bienal Internacional de Pintura de Cuenca (Ecuador, 1994); la V, VI y VII Bienal Internacional de Arte de Valparaíso (Chile; 1981, 1983, 1985); tres exhibiciones colectivas en el Museo de Arte de las Américas de la OEA (Washington D.C. 1985, 1991 y 1992); Dioses, Espíritus y Leyendas en el Museo del Barrio (Nueva York, 1998) y dos de las muestras nacionales semipermanentes en el Museo de Arte de El Salvador (MARTE): ReVisiones (2007) y Al Compás del Tiempo (2011).
Bicard recibió el premio del Certamen Nacional Calificatorio de Pintura Texaco del Centro Cultural Salvadoreño en 1990; un reconocimiento del Club Rotario de San Salvador en 1999; la distinción Pintora Meritísima de la Asamblea Legislativa en 2004; y fue honrada con el Salón de Pintura en Homenaje a Licry Bicard en el Liceo Francés en 2006.
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Su obra forma parte de las colecciones del MARTE, el Museo Forma, la Colección Nacional, el Patronato Pro Patrimonio Cultural, la Pinacoteca de la Universidad Don Bosco, y la del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) en Honduras, así como de numerosas colecciones privadas nacionales y en el extranjero.